A pesar de que tal vez el caso más sonado se haya dado en Madrid, al parecer ha sido una práctica generalizada en el resto del Estado lo que podría ser, lo que podría llamarse Denegación de Auxilio Médico a personas de cierta edad y que reuniesen una serie de características. Si, en efecto, discriminación sanitaria. Denegación de acceso a la Sanidad Pública…. Es tan grave, tan grave, que no encontramos palabras más suaves para definirlo.
En efecto, durante lo peor de la Crisis del COVID-19, casos de no permitir la derivación de un anciano enfermo al Hospital y dejarlo “abandonado” a su suerte (casi siempre su suerte era la muerte), se han dado no solo en Madrid; también en Catalunya, en Galicia, en Castilla y León, e incluso también ha existido estos famosos protocolos de “triaje” en la Comunidad Valenciana.
Lo niego y lo reniego
Negar las afirmaciones de Triaje selectivo hacia personas de cierta edad y ciertas condiciones físicas, LO HAN HECHO TODOS. Absolutamente todos los responsables sanitarios han negado que haya existido discriminación sanitaria hacia los ancianos (y por ende, ser los RESPONSABLES de MILES DE MUERTES).
La Consejera de Sanidad de la Comunidad Valenciana niega estos actos. Es más, indica que si se han adoptado algunas determinadas decisiones ha sido siempre bajo responsabilidad médica y con el visto bueno de los familiares. No obstante, un informe de la propia Consejería que reconoce que el 57% de los ancianos fallecidos en la Comunidad, lo hicieron en sus residencias y no en Hospitales, no parece apoyar las argumentaciones de la Consejera.
En Madrid, además ¡Clama al cielo!
Ya que en Madrid, se ha filtrado documentos de lo que claramente era un protocolo a seguir donde SI que se negaba la posibilidad de traslado al Hospital a determinados ancianos (incluso impedidos físicamente). Es decir, un alto porcentaje de ancianos de una Residencia NO podían acceder al Hospital, se les negó ese Acceso y muy posiblemente, fallecieron sin control médico abandonados a su suerte… los llamados cruelmente “Mórficos”.
Indignación no es lo que ha de tener el Consejero de Madrid de Sanidad al comprobar que se ha filtrado ese y otros documentos que prueban, cuanto menos, LA FALTA DE HUMANIDAD de los que lo han REDACTADO Y FIRMADO. No, el Consejero no puede ni debe manifestarse indignado, sino AVERGONZADO de lo que ha consentido.
Los responsables sanitarios habrían de ser conscientes del dolor, del sufrimiento que han causado a estas personas, tanto a las que se han ido como a las supervivientes, el daño a sus familiares… Este acto, este “triaje” es en definitiva, injusto e inhumano.
Coronavirus COVID-19